Restaurar arrecifes de coral que tienen sustratos no consolidados o con mucho cascajo – fragmentos de coral pequeños no fijos – es muy difícil. Pero unas arañas parecen haber resuelto el problema.
El pasado mes de agosto Corales de Paz fue invitado a conocer y comentar el trabajo de restauración que viene realizando Mars Symbioscience, una división de Mars Inc. en Indonesia.
La atractiva isla de Bali en Indonesia fue sede de un taller de restauración de arrecifes de coral. El taller patrocinado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), Mars Inc. y Paul G. Allen Philanthropies, convocó a una coalición multidisciplinaria única de científicos, ONG, profesionales de restauración de corales, gobierno y empresas. Su objetivo era identificar estándares prometedores basados en la evidencia para escalar los esfuerzos de restauración de corales en todo el mundo.
La asistencia a este taller fue por invitación y Corales de Paz se siente muy halagado de haber sido invitado. Nuestra participación fue en conjunto con Oceanus A.C. de México, y tuvo como fin presentar una revisión del trabajo de restauración coralina que se viene realizando en la barrera mesoamericana y el Caribe suroccidental. Ahí tuvimos la oportunidad de presentar los resultados de la primera fase de nuestro programa Más Grande, Más Efectivo y del proyecto piloto de restauración coralina a gran escala que venimos apoyando en su implementación en la Reserva de Biosfera Seaflower.
La ubicación y anclaje son clave para el éxito de estructuras artificiales en proyectos de restauración coralina. Mars, con su investigación y desarrollo por más de 5 años, ha encontrado la forma de incrementar la resistencia de las arañas a condiciones difíciles del ecosistema.
Después del taller, un subconjunto de participantes continuó a Makassar, Sulawesi para sumergirse y proporcionar una revisión por pares del sistema de restauración de los arrecifes de coral de Mars. Mars ha estado trabajando activamente desde 2011 para desarrollar un sistema escalable, que cualquier persona debidamente capacitada podría utilizar para restaurar las áreas de cascajo dentro de la mayoría de los arrecifes de coral de todo el mundo. La retroalimentación de la revisión por pares después de la inmersión en las tres hectáreas de arrecife restaurado de Makassar fue muy positiva y prometedora para la restauración de áreas de arrecifes de sustrato no consolidado.
Restaurar arrecifes de coral con sustratos no consolidados o con mucho cascajo – fragmentos de coral pequeños no fijos – es muy difícil. La fijación de colonias de coral en estos espacios no es posible pues no existen puntos sólidos de anclaje para los mismos. Con las arañas, el problema se resuelve al anclar la estructura metálica al sustrato y fijar los corales sobre los brazos de las arañas.
Uno de los aspectos más alentadores del proyecto es el trabajo con las comunidades costeras. Son ellas mismas quienes se encargan de preparar las estructuras antes de ser sumergidas. Miembros de la comunidad también hacen parte del trabajo bajo el agua fijando los corales y asegurando las estructuras al sustrato. Igualmente, se viene realizando un trabajo conjunto con operadores de buceo quienes han visto en este modelo de restauración una forma de agregar valor a sus operaciones y sitios de buceo. De esta forma, Mars y la comunidad de Pulau Badi han instalado más de 5000 arañas y han rehabilitado unas 5 hectáreas de arrecife degradado.
Aunque la durabilidad de la estructura y resistencia ante huracanes es un foco de preocupación para muchos restauradores de arrecifes, las arañas han probado ser muy eficientes si son instaladas por personal capacitado y entrenado para ello. Al respecto, los más de 5 años de investigación y desarrollo que ha invertido el equipo de Mars en sus arañas es sin duda la clave del éxito. En general, los resultados son muy alentadores para la restauración de arrecifes con sustratos no consolidados. El vídeo arriba resume los resultados de su programa de restauración coralina.
Funcionarían las arañas en Colombia? La respuesta la tendremos en un par de años. Por ahora, estamos estudiando su viabilidad en los procesos de restauración coralina que se vienen realizando en el país. Más información en los próximos meses.