Entre el 18 y 22 de Marzo de 2021 se celebró la jornada de monitoreo participativo de arrecifes coralinos más esperada del año. Después de un año atípico, la expedición Providencia Reef Check reunió 19 participantes de 8 ciudades de Colombia con el fin de monitorear los arrecifes de las islas de Providencia y Santa Catalina.
La expedición de ciencia ciudadana tomó especial relevancia después de una temporada de huracanes 2020 especialmente activa que tuvo consecuencias directas sobre la población local y la condición de los ecosistemas marinos y terrestres de Providencia (ver noticia). Igualmente, por la expansión de la enfermedad de perdida de tejido en coral duro (SCTLD) que avanza en el Caribe afectando negativamente los arrecifes de la región.

Durante la expedición fue posible la certificación de 9 buzos como Reef Check EcoDivers. El grupo de buzos, ahora habilitados para monitorear la salud de los arrecifes coralinos siguiendo el protocolo internacional Reef Check, incluyó funcionarios del Parque Nacional Natural Old Providence McBean Lagoon (PNNOPML) y líderes locales, con el fin de crear capacidad local que pueda complementar la toma de información sobre la salud coralina en la isla.
Este evento fue una colaboración entre la corporación ambiental del Archipiélago – CORALINA, el centro de buceo Sirius Dive Shop, la posada Nativa Barracudas Camp y Corales de Paz como líderes científicos de la expedición, con el apoyo de más de 5 científicos ciudadanos y de USAID Colombia a través del Programa Riqueza Natural.
Aun se pueden ver predadores en los arrecifes de Providencia. Coral pilar (Dendrogyra cylindrus) afectado por el paso del huracán Iota Arrecife coralino somero de Providencia con corales Orbicella spp Buzos científicos ciudadanos evaluando la salud del arrecife Monitoreando con ayuda de la tecnología para crear fotomosaicos de los arrecifes evaluados.
Gracias a esta colaboración fue posible colectar información sobre la salud coralina de cinco sitios de buceo, tres de los cuales ya se habían monitoreado en la expedición realizada en el 2019 y que habían sido intervenidos posteriormente con el trasplante de coral ese mismo año, logrando así tener información actualizada sobre la dinámica ambiental antes y después del impacto del huracán IOTA en 2020.
Además de la capacitación de buzos recreativos en el protocolo Reef Check, durante la expedición logramos también observar el impacto físico que sufrieron los arrecifes. Colonias de coral fragmentadas y un mayor porcentaje de blanqueamiento en comparación con el último monitoreo de 2019 fueron observados en esta ocasión. En contraste, los resultados de este ejercicio de ciencia ciudadana muestran una baja prevalencia de enfermedades como plaga blanca o banda negra (<10% de la población censada), y la ausencia de la enfermedad de perdida de tejido de coral duro (SCTLD por sus siglas en ingles) en los arrecifes en los arrecifes evaluados.

Corales de Paz con su programa de monitoreo coralino participativo busca servir de sistema de alerta temprana de las condiciones de salud de los arrecifes coralinos del país. Con los buzos recreativos, que frecuentan los arrecifes, queremos proveer información pertinente y adecuada a las autoridades ambientales sobre condiciones de alarma para que las mismas puedan desplegar acciones de respuesta, que permitan actuar efectivamente ante posibles amenazas a nuestros arrecifes coralinos.
El buceo con propósito de conservación de arrecifes coralinos en la Reserva de Biosfera Seaflower es nuestra solución basada en la naturaleza, diseñada para hacer frente a la degradación de un ecosistema estratégico para los habitantes del Archipiélago. Gracias a todos los participantes y a nuestros seguidores por continuar haciendo del buceo con propósito una herramienta de ciencia ciudadana para la conservación de los arrecifes coralinos!
